En un tugurio de mala muerte en algún lugar entre el purgatorio y Camden Town, iluminado por neones parpadeantes y apestando a orina y anfetaminas, Riffs and Beats logró sentarse con Sid Vicious, el fantasma gruñón del punk, de regreso desde el abismo para lanzar una última mueca al mundo que siguió girando sin él.
Riffs and Beats
Sid, ¿qué opinas de la escena musical actual?
Sid Vicious
Es plástico con ritmo. Alguien lo convirtió en una maldita sala de exposición, todo superficies limpias y sin agallas. En nuestra época, un concierto era sudor, escupitajos, cuerdas rotas y tal vez una pelea. Ahora son colaboraciones de marca y coreografías para TikTok. Hay chavales preocupados por la interacción antes de escribir una letra. La música solía ser un puñetazo en la garganta, ahora es solo ruido de fondo para anuncios. Todos quieren ser escuchados, pero nadie tiene nada que valga la pena gritar.
Riffs and Beats
¿El punk está muerto o solo se disfraza de sí mismo en 2025?
Sid Vicious
El punk no murió, lo vendieron y lo envolvieron al vacío. Tomaron lo feo, lo crudo y lo peligroso y lo volvieron seguro. Ahora los chavales se visten como punks, pero llevan un iPhone en una mano y un latte de avena en la otra. El punk iba de no encajar, de no fingir. Era caos en cuero, no un desfile de moda con actitud. Si tus botas cuestan más que tu alquiler, no eres punk, eres un turista.
Riffs and Beats
¿Cómo sobrevivirías en un mundo de filtros de Instagram y apps de mindfulness?
Sid Vicious
No lo haría. Me habrían vetado el primer día o habría tenido una sobredosis en directo en el perfil de alguien. El mundo de hoy quiere que seas blando, digerible, amigable. Eso no es supervivencia, es sedación. Antes vivíamos alto y desordenado. Ahora todo está curado. No puedes desatar tu rabia en píxeles. No puedes sangrar a través de un filtro. Yo necesitaba el ruido, los escombros, el olor a malas decisiones. Prefiero un grafiti a un algoritmo, cualquier día.
Riffs and Beats
Si los Sex Pistols empezaran hoy, ¿qué sería diferente?
Sid Vicious
No llegaríamos ni al primer ensayo. Nos cancelarían, nos demandarían, nos vetarían, tal vez nos arrestarían. Los Pistols eran una bomba de tiempo, no un producto. Hoy ninguna discográfica nos tocaría sin una red de seguridad de relaciones públicas y un equipo de redes sociales. No nos importaba caer bien, nos importaba hacer ruido. No éramos una marca. Éramos una crisis nerviosa con guitarras. Eso no encaja con las condiciones de uso de hoy.
Riffs and Beats
Eras el caos hecho carne. ¿Crees que alguna vez te habrías calmado con la edad?
Sid Vicious
¿¿Calmarme?? ¿Yo? Esa palabra no existe en mi diccionario, colega. Si hubiera vivido, probablemente sería algún lunático haciendo arte ruidoso en una okupa. No tenía un plan a cinco años, apenas uno a cinco minutos. La gente quiere historias de redención. Yo no estaba hecho para eso. Estaba hecho para ser breve, ruidoso y desaparecer. La única forma en que iba a desacelerar era parando del todo.
Riffs and Beats
¿Qué opinas de toda esta conciencia sobre la salud mental en la música actual?
Sid Vicious
Es raro, pero algo brillante. En nuestra época, a nadie le importaba si estabas hecho polvo por dentro. Solo lo ahogabas o lo esnifabas. Ahora al menos la gente admite que está jodida. Tal vez si alguien me hubiera preguntado cómo estaba en vez de darme otra pastilla, las cosas habrían sido distintas. La salud mental debería ser un pogo, desordenada, honesta, ruidosa. Al menos ahora algunos tienen la oportunidad de gritar y ser escuchados antes de desaparecer.
Riffs and Beats
Tú y Nancy, ¿historia de amor o destrucción mutua?
Sid Vicious
No fue una historia, fue un choque. No éramos buenos el uno para el otro, pero éramos todo lo que teníamos. Fue feo, retorcido y a veces extrañamente hermoso, pero fue real. A la gente le gusta romantizarnos. Que les den. Éramos dos chavales rotos enredados en drogas y daños. No había guión. Solo fuego y ceniza. Si pudiera hacerlo otra vez… no lo haría. Pero tampoco lo borraría.
Riffs and Beats
¿Qué opinas de la rebeldía hoy en día?
Sid Vicious
La rebeldía ahora es un hashtag y una línea de sudaderas. Es rebeldía a la venta, limpia y aprobada. En nuestra época, nos perseguían, nos vetaban, nos golpeaban. Tenías que ganarte el dedo del medio. Ahora la gente actúa rebelde en su hora de comida y luego vuelve a su trabajo de oficina. Si no te cuesta algo, no es rebeldía. Es un disfraz. La verdadera rebeldía te echa fuera, no te da likes.
Riffs and Beats
Sigues siendo un icono del punk. ¿Te parece irónico?
Sid Vicious
¿Icono? Qué maldita broma. Ni siquiera podía afinar mi bajo la mitad del tiempo. Me convirtieron en una camiseta. La gente lleva mi cara y no aguantaría ni diez minutos en el mundo del que vengo. No estaba hecho para ser recordado – estaba hecho para autodestruirme con estilo. Pero si ser un desastre ayuda a alguien a ser honesto, tal vez no esté todo tan mal. Aun así, no me llames leyenda. Solo dime que me fui.
Riffs and Beats
¿Último grito desde el más allá, Sid?
Sid Vicious
Quémalo todo. Destrúyelo. No seas cortés. No busques seguridad. Si el mundo tiene sentido, probablemente lo estás haciendo mal. Rompe a tus ídolos, haz tu propio ruido y no esperes permiso. La vida es demasiado corta para portarse bien. Si no estás poniendo nervioso a alguien, no lo estás intentando lo suficiente.
Mientras nuestro tiempo se desenrollaba como un cable de ampli en un pogo, Sid se levantó, lanzó su cigarro contra la pared y murmuró algo sobre robarle el mechero a Dios. Luego desapareció en un zumbido de distorsión y estática. Sin adiós, sin apretón de manos, solo un rastro de feedback y el leve olor a gasolina.
